A los 85 años de edad, este gran visionario dejaba de existir, pero nos deja un legado sin lugar a dudas memorable.
¿Qué sería del entretenimiento moderno sin Hiroshi Yamauchi?
Hiroshi Yamauchi nació el 7 de Noviembre de 1927 en Kyoto.
Años mas tardes, se convertiría en el tercer presidente de la empresa de su familia fundada por Fusajiro Yamauchi: Nintendo. Pero, contrario a la creencia popular, el no fue el nieto del fundador, si no, en realidad fue hijo de la nieta del fundador: Kimi Yamauchi.
Su padre Shikanojo Inaba cambió su apellido para heredar el negocio familiar, repitiendo la hazaña de Sekiryo Yamauchi, quien es el abuelo de Hiroshi Yamauchi, el cual también cambió su apellido al casarse con Tei, la hija de Fusajiro, para así quedarse con la presidencia de Nintendo tras el retiro del fundador. Sin embargo esto nunca llegó a pasar: Shikanoko abandonó a Kimi y a un Hiroshi de tan solo 4 años en plenos tiempos de guerra, por lo cual, la empresa había quedado sin heredero, y es cuando el pequeño Hiroshi es el elegido de Sekiryo, al ser el único heredero varón de la familia.
Pasó el tiempo y a los 66 años, Sekiryo cae enfermo, y es el momento en el que el joven Hiroshi, de 22 años de edad, toma el mando de la empresa, como se dice por ahí "más a la fuerza que por ganas" pues nunca tuvo deseos de comandar algún día la empresa: Nunca se llevó muy bien con su familia, y la idea de seguir con una tradición propia del japón iba en contra de su actitud de cambio, inspirada en las modas occidentales.
Y eso se notó. En cuanto Hiroshi tomó el mando, Nintendo cambiaría por siempre
Tras años de re-estructuraciones, cambios internos de la empresa y cambios de filosofía, con un enfoque mucho mas creativo, la compañía Nipona firmaría un contrato con la empresa estadounidense Disney, para fabricar cartas con los personajes como Mickey Mouse y popeye en Japón, y a partir de ese momento el valor en bolsa de Nintendo asciende por los cielos, es la oportunidad de que Hiroshi lleve a cabo su plan: Llevar la empresa a otros rubros, a pesar de que la idea era mal vista por los demás miembros de la familia.
Hiroshi era un hombre fuerte de palabra, si tenía una idea, esta se llevaba acabo hasta las últimas consecuencias, y así fue, Nintendo, con el dinero obtenido de su alianza con Disney comenzó a probar en varias áreas: Un canal de televisión, una fábrica de platos de arroz instantáneos, una compañía de taxis (que de hecho, aún existe) y hasta una línea de moteles.
Todos, o en su gran mayoría, un fracaso, pero Yamauchi se topó un día con un empleado, un conserje, un encargado de mantenimiento de la línea de montaje que era un genio en la electrónica.
Gunpei Yokoi fue descubierto por Yamauchi mientras jugaba con un extraño "juguetito" creado por el mismo que era una especie de mano mecánica para alcanzar objetos a grandes distancias. ¿Qué haría tu jefe en estos casos si te ve jugando mientras deberías estar trabajando?. Seguramente una buena regañada si te llevas, pero en este caso, a Yamauchi se le presentó una revelación, otra oportunidad de expandir la empresa. Yamauchi se interesó en las creaciones del joven Yokoi y comenzó a comercializarlas.
Después de la Ultra Hand vendrían otros juegos como "Ultra Machine", un lanzapelotas de baseball, el "Tenbirón" un cubo rubick matemático e incluso llegó a comercializar juegos de la marca "Hasbro" en japón.
Eran los años 70, Yamauchi ya había decidido enfocar su empresa al entretenimiento electrónico, en el occidente se veían cosas como la Magnavox Odissey y la Atari 2600, aparatos en los que podías jugar en tu televisión, y de la mano de Yokoi crean una serie de arcades, y juegos de pong como la "Color TV Game", hasta que el mismo Yamauchi descubriera a otro empleado, que en ese entonces, se encargaba de pintar las máquinas recreativas de la empresa: Shigeru Miyamoto, que posteriormente crearía el videojuego que llevaría a la fama mundial a la empresa: Donkey Kong.
Lo que sigue, es una historia de éxito tras éxito, se lanzaron los "Game & Watch" creados por Yokoi, y la empresa lanzó la NES, la consola que salvaría, literalmente a los videojuegos del gran bache en el que cayeron. Si Nintendo jamás hubiera intervenido en el mundo de los videojuegos, hoy estos probablemente no existirían o serían bastantes diferentes a como son hoy.
La visión e idea de Hiroshi Yamauchi llevó a la expansión de su compañía, se hizo una multinacional, salvó el mundo de los videojuegos, y nos trajo horas de entretenimiento con la NES, Super NES, Nintendo 64, Game Cube, Game Boy y Game Boy Advance, consolas que se lanzaron bajo su mandato y en las cuales participó activamente Yamauchi.
El legado de este gran hombre que el día de hoy nos dejó es innegable. Gracias a el podemos disfrutar estas historias, estas horas de entretenimiento que nos brindan los juegos de video.
Independientemente de si te guste o no en la actualidad Nintendo, Hiroshi Yamauchi se ha ganado un lugar con letras doradas en la historia del entretenimiento digital, y también, en la historia moderna de la humanidad.
Descanse en paz, Hiroshi Yamauchi.
Yo soy Ebermed.
Adios.
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